Ocurrió este miércoles, cuando los efectivos daban curso a sus tareas preventivas que observaron cómo un joven que se encontraba en la intersección de calles Bulnes y Rapelli, echó a correr en el momento que notó la presencia policial, actitud que inició un seguimiento a distancia por parte de los uniformados.
A pocos metros, el susodicho fue alcanzado por los servidores públicos que, tras efectuarle el correspondiente procedimiento de identificación, descubrieron que sobre el sospechoso recaía una medida judicial vigente por un hecho de violencia doméstica.
En ese contexto, el imputado fue notificado de la prohibición de acercamiento hacia la víctima y apertura de las tramitaciones judiciales pertinentes al caso.