En un operativo llevado a cabo en la localidad de Trancas, al norte de la provincia de Tucumán, personal de la Policía de Seguridad Vial logró incautar 450 kilos de hojas de coca que eran transportados de manera ilegal. El procedimiento se produjo cuando un conductor intentó evadir un control policial y, tras una breve persecución, fue interceptado. La importante cantidad de mercadería decomisada estaba escondida en el interior de una camioneta.
El hecho ocurrió durante la madrugada de este miércoles en un puesto de control ubicado sobre la Ruta Nacional 9, a la altura del kilómetro 1343. Allí, efectivos de la Policía Vial, que realizaban tareas preventivas, observaron la actitud sospechosa del conductor de una camioneta Ford Ranger blanca que, al percatarse del operativo, intentó huir a gran velocidad por un camino alternativo.
Tras una rápida persecución por caminos rurales de la zona, los agentes lograron interceptar al vehículo. Al realizar la inspección correspondiente, se descubrieron varias bolsas negras de gran tamaño que contenían hojas de coca distribuidas en paquetes. El pesaje oficial confirmó que la carga alcanzaba los 450 kilogramos.
El conductor, un hombre mayor de edad, no contaba con la documentación legal para el traslado de este tipo de carga, lo que constituye una infracción a la legislación vigente. Por tal motivo, fue demorado y puesto a disposición de la Justicia Federal, que tomó intervención en el caso.
Según fuentes oficiales, el transporte de hojas de coca en cantidades superiores a lo permitido por ley constituye una infracción aduanera y puede tener implicancias penales, ya que muchas veces este producto es destinado a la elaboración de sustancias ilegales.
La mercancía quedó secuestrada junto con el vehículo utilizado para el traslado. Además, se investigan posibles conexiones con redes de contrabando que operan en la frontera norte del país, ya que la hoja de coca es originaria de Bolivia y su ingreso a Argentina está regulado estrictamente por normativas nacionales.
Desde la fuerza indicaron que este tipo de controles continuará intensificándose en todo el norte tucumano, especialmente en las rutas que suelen ser utilizadas como corredores alternativos para el contrabando. “El objetivo es frenar el ingreso irregular de productos y proteger la salud pública”, señalaron.