Un hecho insólito y alarmante tuvo lugar en la capital tucumana durante la mañana del viernes 16 de mayo, cuando un hombre de 67 años fue víctima de un intento de robo mientras se encontraba dentro de su camioneta estacionada en calle Díaz Vélez al 3000.
Según informó la Unidad Especializada de Robos y Hurtos I del Ministerio Fiscal, un sujeto de 25 años se acercó al vehículo del adulto mayor y le solicitó $500 con la supuesta intención de comprar comida. Ante el gesto solidario de la víctima, que intentaba entregarle el dinero, el joven le arrebató su celular y emprendió la huida a pie.
La rápida intervención de personal policial evitó que el ilícito se consumara plenamente. El individuo fue aprehendido en pasaje Belisario López al 3400, aún con el teléfono móvil en su poder, el cual había sido sustraído momentos antes. La víctima logró recuperar su pertenencia gracias a la acción inmediata de los efectivos.
El sábado 17 de mayo se llevó a cabo la audiencia de control de detención, formulación de cargos y solicitud de medidas de coerción. En representación del Ministerio Público Fiscal, la auxiliar de fiscal Fernanda Antoni Piossek, bajo las instrucciones del titular Diego López Ávila, imputó al joven por el delito de hurto en grado de tentativa, en calidad de autor.
Durante su exposición, la representante fiscal remarcó la existencia de riesgos procesales vinculados a la falta de arraigo del imputado y una condena penal anterior, lo que motivó el pedido de prisión preventiva. Además, destacó un elemento relevante en el análisis del caso: “Eligió especialmente a la víctima (adulto mayor) con una menor capacidad de repeler su acción”, lo que evidenciaría un accionar premeditado por parte del acusado al seleccionar a una persona vulnerable.
Tras evaluar los fundamentos presentados, el juez interviniente dio lugar al requerimiento del Ministerio Fiscal y ordenó la prisión preventiva del imputado por el plazo de 10 días, medida que tendrá vencimiento el próximo martes 27 de mayo.
El hecho pone en relieve la importancia de mantener la alerta frente a situaciones de aparente vulnerabilidad social que pueden encubrir intenciones delictivas. Asimismo, la actuación policial fue determinante para evitar mayores consecuencias para la víctima y posibilitar una intervención judicial inmediata.
La Unidad de Robos y Hurtos I continúa con la investigación del caso para profundizar en los antecedentes del detenido y determinar si estuvo involucrado en otros hechos similares.