En una reunión de alto contenido político e institucional, el vicegobernador a cargo del Poder Ejecutivo, Miguel Acevedo, recibió esta mañana en Casa de Gobierno al presidente subrogante de la Legislatura, Sergio Mansilla, con el fin de retomar la agenda de trabajo tras la reciente licencia de Acevedo. Durante el encuentro, ambos dirigentes analizaron el escenario político y social de Tucumán, evaluando tanto los desafíos locales como el impacto de la situación económica nacional en la provincia.
En un contexto donde la coyuntura nacional genera tensiones e incertidumbre, los funcionarios pusieron el foco en la necesidad de fortalecer las políticas públicas prioritarias, entre ellas aquellas vinculadas al empleo, la seguridad, la educación y la contención social. Coincidieron en que la articulación entre los poderes del Estado es clave para garantizar respuestas concretas y efectivas ante los problemas que afectan a los tucumanos.
Uno de los temas centrales del encuentro fue el análisis del Congreso Nacional del Partido Justicialista, recientemente llevado a cabo, en el que se ratificaron compromisos de unidad dentro del espacio peronista de cara a un año político desafiante. En ese sentido, tanto Acevedo como Mansilla destacaron la importancia de “preservar la cohesión interna del peronismo tucumano y sostener una conducción sólida” para encarar los desafíos que se avecinan tanto en lo institucional como en lo electoral.
“El contexto nacional nos obliga a tener una mirada realista pero activa, para generar medidas que protejan a los sectores más vulnerables y que acompañen a quienes producen y trabajan”, habría expresado Miguel Acevedo, quien asumió nuevamente sus funciones ejecutivas luego de una breve licencia.
Por su parte, Sergio Mansilla remarcó la necesidad de “profundizar el diálogo entre el Ejecutivo y la Legislatura para avanzar en leyes que mejoren la calidad de vida de los tucumanos”. Subrayó también que este tipo de encuentros ayudan a mantener el ritmo de gestión y permiten ajustar estrategias según los cambios que impone la dinámica nacional.
La reunión se dio en un momento donde la situación económica del país genera impactos directos en las provincias, con efectos en la recaudación, la inversión pública y la capacidad del Estado para mantener servicios esenciales. Por eso, tanto Acevedo como Mansilla coincidieron en que es indispensable “trabajar con responsabilidad institucional y sensibilidad social”.
Desde el entorno de ambos dirigentes se valoró la posibilidad de construir consensos y fortalecer el trabajo mancomunado, especialmente en áreas críticas como el desarrollo social, la infraestructura y la seguridad. Asimismo, manifestaron su intención de continuar este tipo de encuentros con regularidad, para dar seguimiento a la evolución de los temas debatidos y profundizar el vínculo institucional entre los poderes Ejecutivo y Legislativo.
Este tipo de reuniones no solo muestran una señal de unidad dentro del oficialismo, sino que también buscan consolidar una gestión pública alineada con las demandas ciudadanas, en momentos donde la cercanía con la gente y la capacidad de respuesta del Estado resultan determinantes.