A través de la Resolución N.° 764/SPS, el Ministerio de Salud Pública de Tucumán, encabezado por el doctor Luis Medina Ruiz, dispuso el uso obligatorio de barbijos o mascarillas faciales en todos los establecimientos de salud de la provincia, tanto públicos como privados.
La decisión surge tras un exhaustivo informe elaborado por la Dirección de Epidemiología, que analizó la situación actual respecto a las enfermedades tipo influenza en Tucumán. El estudio alertó sobre un incremento sostenido de infecciones respiratorias transmisibles, lo que motivó la implementación de esta medida como forma de proteger a la población más vulnerable.
“La prioridad es garantizar condiciones adecuadas de bioseguridad en los ámbitos donde se concentran pacientes inmunocomprometidos, adultos mayores, niños y personas con enfermedades crónicas”, señala el comunicado oficial.
La normativa rige para todos los sectores del sistema de salud:
- Personal sanitario, ya sea médico, de enfermería o administrativo.
- Pacientes que ingresen a consultas, emergencias o internaciones.
- Visitantes en general.
En todos los casos, el uso del barbijo será obligatorio dentro de los espacios cerrados de atención médica, salas de espera, internación y áreas comunes de circulación. La única excepción aplica para aquellas personas que posean condiciones médicas documentadas que contraindiquen el uso de mascarillas.
Por qué se vuelve a implementar el uso del barbijo
El retorno del uso obligatorio de barbijos en centros de salud responde a criterios científicos y sanitarios. Según el Ministerio, esta medida ha demostrado ser eficaz, accesible y de bajo costo para frenar la propagación de virus respiratorios, especialmente en entornos donde existe una alta concentración de personas con riesgo sanitario.
“La prevención es fundamental en esta época del año, cuando los virus respiratorios circulan con mayor intensidad”, explicó Luis Medina Ruiz, quien remarcó que el objetivo es proteger tanto al personal de salud como a los pacientes y sus familias.
La medida también contempla su aplicación en sanatorios, clínicas privadas y consultorios particulares. Los responsables de estos espacios deberán garantizar la provisión y control del uso del barbijo, así como reforzar las campañas de higiene de manos y ventilación adecuada.
Una respuesta preventiva frente al aumento de casos
El Ministerio recordó que el uso de barbijo en ambientes asistenciales no es una novedad, ya que fue ampliamente utilizado durante la pandemia de COVID-19 y demostró ser un recurso clave para la protección de la salud colectiva.
Si bien no se trata de una alarma generalizada, las autoridades sanitarias subrayaron que la circulación viral en esta etapa invernal hace necesario adoptar medidas preventivas, especialmente en espacios cerrados con personas vulnerables.
“Es una forma de cuidar a quienes más lo necesitan”, destacaron desde el Sistema Provincial de Salud (SIPROSA).
Desde el Ministerio, también se alienta a la población a completar esquemas de vacunación contra la gripe, extremar medidas de higiene y consultar ante la presencia de síntomas respiratorios, como fiebre, tos, dolor de garganta o dificultad respiratoria.