Gobernadores de todo el país, encabezados por Osvaldo Jaldo, impulsan un ambicioso proyecto de ley que busca modificar el destino de fondos claves de la recaudación nacional, con el objetivo de lograr una distribución más equitativa de los recursos entre Nación y provincias. El debate, desarrollado este lunes 23 de junio en la sede del Consejo Federal de Inversiones (CFI) en Buenos Aires, reunió a mandatarios de distintos signos políticos en un gesto inusual de unidad federal.
La iniciativa propone redireccionar lo recaudado por el Impuesto a los Combustibles Líquidos, actualmente destinado a fondos fiduciarios como el de Infraestructura del Transporte y el Hídrico, hacia las provincias en función de la Ley de Coparticipación Federal 23.548. De la misma manera, busca coparticipar automáticamente los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) que no se utilicen para casos excepcionales de emergencia.
“Queremos que los recursos que se generan en nuestras provincias vuelvan a nuestras provincias”, señalaron varios mandatarios durante el encuentro.
Claves del proyecto
El proyecto plantea la sustitución del artículo 19 de la Ley 23.966, que actualmente distribuye el impuesto a los combustibles. La nueva propuesta establece la siguiente distribución:
- Tesoro Nacional: 10,40%
- Provincias: 58,36%
- Sistema Único de Seguridad Social: 28,69%
- Compensación al Transporte Público: 2,55%
Además, se impulsa la disolución de fondos fiduciarios como el Sistema de Infraestructura del Transporte (FFSIT) y el Fondo de Infraestructura Hídrica (FFIH), creados por decretos anteriores y considerados mecanismos opacos en su distribución.
Otro punto relevante es la modificación del artículo 5º de la Ley 23.548, con el fin de que los ATN sean asignados automáticamente y con criterios objetivos relacionados a emergencias financieras o desbalances económicos. Esta reasignación se realizaría con parámetros transparentes y de distribución diaria, eliminando la discrecionalidad política en el manejo de estos recursos.
El respaldo político
Además del gobernador tucumano Osvaldo Jaldo, participaron del encuentro figuras clave del arco político nacional. Estuvieron presentes:
- Axel Kicillof (Buenos Aires)
- Jorge Macri (CABA)
- Sergio Ziliotto (La Pampa)
- Gerardo Zamora (Santiago del Estero)
- Gustavo Melella (Tierra del Fuego)
- Rogelio Frigerio (Entre Ríos)
- Hugo Passalacqua (Misiones)
- Maximiliano Pullaro (Santa Fe)
- Alfredo Cornejo (Mendoza)
- Alberto Weretilneck (Río Negro)
- Raúl Jalil (Catamarca)
- Claudio Poggi (San Luis)
- Martín Llaryora (Córdoba)
- Marcelo Orrego (San Juan)
- Carlos Sadir (Jujuy)
- Gustavo Sáenz (Salta)
- Ignacio Torres (Chubut)
También participaron los vicegobernadores Silvana Schneider (Chaco), Teresita Madera (La Rioja) y Fabián Leguizamón (Santa Cruz), junto a un representante de Neuquén, cuya vicegobernación se encuentra vacante tras la salida de Gloria Ruiz.
Desde el Gobierno nacional, acompañaron el encuentro el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán, y el secretario de Hacienda, Carlos Guberman. El titular del CFI, Ignacio Lamothe, ofició como anfitrión del encuentro que podría marcar un punto de inflexión en la relación fiscal entre Nación y provincias.
Un paso hacia el federalismo real
El documento firmado por los mandatarios expresa que la iniciativa no pondrá en riesgo la sostenibilidad fiscal de la Nación. Por el contrario, propone un modelo de coparticipación transparente, previsible y con reglas claras, que fortalezca la autonomía y gobernabilidad de las provincias.
El reclamo por más federalismo fiscal no es nuevo, pero esta vez viene acompañado de una propuesta legislativa concreta, consensuada y respaldada por una amplia mayoría de gobiernos provinciales.