Nueva Zelanda se clasificó a la final del Mundial de Rugby tras ganar con claridad por 44 a 6 a Argentina que no pudo frenar la gran superioridad de los «All Blacks» en todos los ámbitos del juego.
Los neozelandeses, que se mostraron muy superiores durante casi todo el encuentro, especialmente en el segundo tiempo. Mantuvieron su ilustre tradición y se clasificaron para su quinta final en diez mundiales. En las cuatro anteriores lograron tres títulos y un subcampeonato.
«Los Pumas» mantuvieron la intensidad que les había llevado hasta aquí, pero cometieron errores en ajustes defensivos y no lograron anotar un ensayo. Un balance claramente insuficiente ante un equipo que juega al rugby con mucha calidad y oficio, pero también con el orgullo de llevar la legendaria camiseta negra.
El seleccionado nacional, deberá jugar por el tercer puesto la próxima semana frente al perdedor de la semifinal entre Inglaterra y Sudáfrica.